El presidente Lenín Moreno calificó de «devastadores» a los efectos que una dura temporada de lluvias deja en el país desde octubre pasado, provocando la muerte de 21 personas y heridas a 49.
Indicó que se están utilizando los recursos del presupuesto nacional para atender la emergencia de la época invernal que sufre la Costa ecuatoriana. Informó que se ha declarado la alerta naranja en seis provincias: «La costa ecuatoriana sufre un embate de la naturaleza y el Gobierno Nacional ha decidido apoyar con la entrega de un bono, por única ocasión, de $50 dólares a las personas damnificadas”.
«El invierno está provocando efectos devastadores», dijo el mandatario.
Moreno, quien en los últimos días sobrevoló áreas inundadas, agregó que la costa ecuatoriana «sufre el embate de la naturaleza» y apuntó que los aguaceros no tienen relación con el fenómeno de El Niño, que aumenta la temperatura promedio del planeta y origina cambios climáticos como lluvias y sequías.
«No es un fenómeno de El Niño, no configura un fenómeno de El Niño», señaló.
Las lluvias azotan a todo el territorio continental de Ecuador, incluidas provincias fronterizas con Colombia (norte) y Perú (sur).
Seis provincias costeras están declaradas en alerta naranja (previa a la roja, de máxima peligrosidad) por las torrenciales precipitaciones.
Además, mencionó que habrá proyectos para los cantones del país: “Vamos a hacer en todos los cantones por lo menos dos o tres proyectos. Estamos avanzando en proyectos de aplanamientos”.
Ayer, Moreno realizó la entrega de bonos en la zona de Los Ríos, lo hizo en compañía de Jorge Wated, presidente del directorio de BanEcuador; la ministra de Inclusión Económica y Social, Berenice Cordero; y el gobernador de Los Ríos, Camilo Salinas.