La temporada invernal pasa factura a productores y comerciantes de cacao de Santo Domingo de los Tsáchilas. Los cultivos se han visto fuertemente afectados por las constantes lluvias registradas. Según Gladys Jumbo, comerciante, esta situación no solo les afecta a los productores sino también a quienes comercializan el producto, pues evidencian bajas en la compra y venta que superan el 65% de pérdidas.
Esta versión la respalda el comerciante Franco Jiménez, quien a su vez enfatiza que el cacao es un fruto tropical veranero. Con la llegada del invierno se llena de agua y esto dificulta su secado y ganancia en peso. Es decir, si anteriormente un productor cosechaba 100 quintales de cacao, su peso no reflejaba mayores variaciones; no obstante, debido a la temporada invernal, de momento una plantación en la que se sacaba esta cantidad hoy se obtiene menos de la mitad. Afectándose también la calidad del producto pues existe un incremento de monilla.
A su vez, los productores detallan las pérdidas que les representa la monilla en sus plantaciones, pues es una problemática que incide en la calidad, peso y representa más trabajo para el agricultor.
Estos problemas evidencia el sector cacaotero en cada invierno, sin embargo, manifiestan que este sería uno de los más fuertes no solo por las condiciones climáticas sino también por el alza en el precio de fertilizantes y demás productos de utilidad agrícola que utilizan para cultivar la tierra, aún cuando no tengan ganancias en la venta de sus productos.